jueves, 25 de julio de 2013

LA MUERTE NO NECESITA PALABRAS, SE ANUNCIA SOLA.

Desde aquí quiero dar mi más sentido pésame a todas las familias de los afectados por el fatídico accidente ferroviario cerca de Santiago de Compostela.

Un suceso por ahora inexplicable, pero con muchas sospechas sobre el exceso de velocidad que ha ocasionado este fatídico desenlace.

También hay que reseñar la afluencia de demandantes de agujas que ayer noche esperaban impacientemente en los hospitales de Galicia, entre los que se encontraba el Nicolas Peña de Vigo, para donar sangre y poder ayudar a todas estas personas, con un poco de su vida. En esta sociedad cada vez más individualista, es un placer ver como se aúnan esfuerzos y colaboración por parte de las personas y hacia las personas. Desde aquí rompo una lanza a favor de todas estas almas solidarias, que no dudaron ni un solo instante, en ofrecerse para poder minimizar, si cabe, las consecuencias de esta tragedia.

Desde mi humilde hogar, solo ruego que no haya más víctimas, que se aclare todo lo antes posible para poder evitar futuros errores semejantes al dado,  pero sobre todo y ante todo, pido paz para todas estas personas que lloran la desaparición de los suyos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario